Reducción de inspecciones fallidas para agilizar el programa de control de calidad

El control de calidad en origen es fundamental para que un negocio asegure la calidad de sus productos y proteja la marca. Lo que se logra ahorrar en los costos al disminuir la reelaboración, las devoluciones y las retiradas usualmente sobrepasa por mucho los costos de establecer y llevar a cabo un programa de control de calidad eficaz y bien gestionado.

Este estudio de caso demuestra cómo QIMA ayudó a un negocio internacional de abastecimiento a optimizar los costos de su control de calidad al disminuir las inspecciones fallidas, asegurando al mismo tiempo que los horarios de producción eran observados y se salvaguardaba la calidad del producto.

Estudio de caso

El cliente

El cliente es una organización profesional de abastecimiento responsable de la adquisición de bienes de consumo para su empresa matriz y clientes terceros. El cliente tiene un ingreso anual de más de 41 mil millones de dólares estadounidenses y da empleo a más de 150,000 personas en 35 países. Sus regiones de mayor abastecimiento son el sureste de Asia, Norteamérica y Turquía.

Desafío

El cliente tenía un programa de control de calidad en curso, pero batallaba con una tasa de inspecciones fallidas alta. Una inspección fallida se refiere a una situación en las que el especialista de control de calidad llega al sitio de producción para realizar una inspección de producto, pero es incapaz de hacerla ya que el producto no está listo para la inspección tal como se había programado (la producción no ha terminado, la mercancía no estaba empaquetada, etc.)

En 2014, la tasa de inspecciones fallidas en la cadena de suministro del cliente fue de más del 10%, lo que se tradujo en una pérdida de 187,500 dólares al año.

Antes de empezar la colaboración con QIMA, el cliente había intentado resolver el problema al enviar recordatorios a las fábricas y a hacer llamadas telefónicas antes de la inspección planeada. Sin embargo, este método no logró producir una mejora debido a:

  • el tamaño de la base de proveedores del cliente
  • no dirigirse a proveedores problemáticos específicos
  • la falta de seguimiento del impacto de los recordatorios

El cliente contactó a QIMA, un proveedor líder en soluciones de control de calidad inteligente y cumplimiento, con el objetivo de optimizar su programa de control de calidad, reduciendo así el costo de las inspecciones fallidas y analizando el desempeño de proveedores para identificar puntos críticos en su cadena de suministro.

Solución

Usando los datos recolectados durante las inspecciones de producto del cliente y acumulados en el dashboard de QIMA, QIMA fue capaz de identificar fábricas y proveedores específicos con las tasas de reportes incumplidos más altas. Estas fábricas recibieron recordatorios personalizados e individuales sobre las próximas inspecciones. Además, el día anterior a la llegada de los inspectores, los equipos de QIMA contactaban a los proveedores por teléfono para obtener confirmación directa del estado estatus de producción del envío a inspeccionar. A falta de confirmación afirmativa, las inspecciones se reagendaban.

A través del seguimiento cercano de QIMA de todas las fábricas de bajo rendimiento, se redujo considerablemente el número de inspecciones fallidas.

Mientras tanto, se compartían los detalles de cualquiera de las inspecciones fallidas a pesar de estas medidas con el cliente a través del dashboard de QIMA. Con acceso a sus datos de abastecimiento en tiempo real, el cliente era capaz de ver el desempeño de cada proveedor de manera individual comparado con su cadena de suministro, industria y región. Por lo tanto, fueron capaces de tomar decisiones informadas sobre su gestión de proveedores, tales como:

  • Priorizar a los proveedores de alto desempeño
  • Educar a los proveedores de bajo desempeño en la gestión de productos y ayudarles con la programación de la producción
  • Quitar los proveedores que no se mostraron dispuestos o no pudieron mejorar después de un periodo de tiempo determinado

Impacto

Dentro de los primeros 36 meses de asociación con QIMA, la tasa de inspecciones incumplidas en la cadena de suministro del cliente bajó un 20%, representando ahorros de aproximadamente 40,000 dólares estadounidenses por año.

Después de del éxito de la implementación en China, el cliente extendió su asociación con QIMA en países más desafiantes para los reportes incumplidos, tales como India y Bangladesh. El método detallado basado en datos asegura que el cliente tenga acceso sin interrupciones a la inteligencia de abastecimiento en tiempo real, lo cual es fundamental para su esfuerzo continuo por mejorar la gestión de los proveedores y optimizar su cadena de suministro.